El ataque de los huzíes contra la guardia del presidente, Mansur Hadi, fue una pequeña batalla, sin embargo, ha puesto fin a una importante etapa histórica en Yemen. (…) Los huzíes cercaron al presidente de la república como hizo antes con el presidente del gobierno para convertirles en dos rehenes que deben utilizar sus competencias para satisfacer las demandas de los huzíes que quieren controlar el país. Una de las primeras demandas que antes rechazaba Hadi es el uso del Ejército para tomar la ciudad de Márib rica en petróleo para concentrar los recursos económicos yemeníes en manos de los huzíes que se aprovecharon de las batallas internas dentro del Estado profundo y del clima regional que les favorece gracias al apoyo directo de Irán y la pasividad del apoyo árabe a Hadi y su gobierno. (…) Yemen es más grande que los huzíes, pero a la luz de la balanza actual de las fuerzas regionales y las prioridades de Occidente es posible que controlen el país, aunque será complicado que este dominio se perpetúe por mucho tiempo.

Entradas recomendadas

Aún no hay comentarios, ¡añada su voz abajo!


Añadir un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *