Ley César, Al Arabi al Yadid_Emad Hayyach_22.06.2020

 

Satea Nureddín

Al Mudun, 11/06/2020

 

(…)

Hay datos que permiten augurar que el acercamiento en el cambio de las dos divisas refleja cierta  similitud entre la situación del régimen libanés y la del régimen sirio, más parecidos ahora que en cualquier otro momento, entrado juntos en un oscuro túnel del que no podrán salir por separado independientemente de las circunstancias de la revolución popular a la que cada uno de ellos se enfrenta, y de las injerencias  externas que influyen en la gestión de los asuntos de Líbano y de las intersecciones que se producen en  Siria.

 

El “vínculo” actual de las dos monedas no es fruto de la casualidad. Y esto lo sabe hasta el último traficante de divisas de la frontera de los dos países, tal y como lo saben y admiten quienes compran y venden esas divisas. Las sanciones de Estados Unidos que han cortado y siguen cortando esa arteria financiera vital entre ambos Estados y sus habitantes, son, sin la menor duda, la razón principal del colapso de ambas divisas y de la pérdida de su poder adquisitivo. Se equivoca quien piense que Washington se preocupa por el destino de la economía libanesa y la posible bancarrota del Estado libanés, ocupado como está en su incesante lucha por cambiar el régimen sirio, que ganará impulso adicional a partir de la próxima semana cuando se aprueben los decretos de aplicación de la Ley César. En la Administración Trump, existe un equipo conocido públicamente que busca abiertamente la ruina de Líbano, por ser el patio trasero del régimen de Bashar al Asad y una base principal de Irán y de su estimado partido. Y en la cúpula rusa y la cúpula iraní hay un equipo, también conocido públicamente, que considera que Bashar, que se ha enriquecido en un poder que ha corrompido y vaciado de todo su contenido, no merece ningún sacrificio más, como tampoco merece ninguna simpatía ni atención la muerte de los ciudadanos sirios como consecuencia de la pobreza o el hambre.

 

Hay un detalle importante en este contexto, y es que el colapso de la moneda siria no es solo fruto del renovado bloqueo estadounidense ni de esa carrera frenética contra la debilitada lira libanesa: al régimen sirio, que está pagando el precio de sus nueve locos años de guerra, se le exige pagar las deudas contraídas con sus dos aliados, Irán y Rusia, quienes a su vez se enfrentan a una crisis económica decisiva. Y está obligado a pagarlas con las riquezas de la familia, administradas por Rami Majluf, y sus innumerables depósitos, inversiones y sociedades libanesas.

(…)

 

Viñeta de Emad Hayyach para Al Arabi al Yadid

 

Traducido del árabe por Luis Serrano Lora en el marco de un programa de colaboración de la Facultad de Traducción e Interpretación de la Universidad de Granada y la Fundación Al Fanar.

 

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