Mohamed Jair
En las manifestaciones del Viernes de la Tierra la única sorpresa no fue la vuelta a la calle de miles de jóvenes, ni que éstos tuvieran una veintena de años o incluso menos, lo que significa que eran adolescentes o incluso niños cuando estalló la revolución de enero hace cinco años. La gran sorpresa es que en esas manifestaciones, que se extendieron por varias provincias, no hubo ningún muerto ni se disparó una sola bala. Fueron manifestaciones blancas en las que afortunadamente no hubo sangre. Y no solo fueron blancas porque no hubo muertos sino porque se detuvo a centenares de manifestantes que fueron liberados esa misma noche (salvo 25 de ellos que siguen detenidos cuando escribimos estas líneas) (…)
En otras palabras, las manifestaciones de protesta del pasado viernes contra el trazado de la frontera marítima saudí-egipcia y contra la cesión de las islas de Tirán y Sanafir al reino saudí, recuperan el tiempo de las manifestaciones de Kifaya y otras manifestaciones de la era de Mubarak (…)
¿El régimen egipcio ha decidido volver a la “represión soft de Mubarak” o, como dicen algunos, tenía miedo de que se produjeran nuevos muertos mientras esperaba la visita de Hollande y de su delegación económica? (…)
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Viñeta de Emad Hayyach para Al Arabi al Yadid
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