Al comienzo de la revolución en Siria los «revolucionarios» que se manifestaban de forma pacífica, no pudieron trasladar a sus heridos a los hospitales, en su mayoría públicos, por miedo a ser detenidos. Esta realidad les obligó a montar hospitales de campaña para atender a los heridos con los recursos disponibles.
Cuando la movilización pasó la fase de contienda militar, estos hospitales desempeñaron un papel importante en la atención a los heridos de guerra ya fueran militares o civiles.
Las afueras del norte de Hama y las afueras del sur de Idlib han sido recientemente atacadas por aviones de guerra y helicópteros que lanzan barriles explosivos dejando decenas de víctimas, sin distinguir entre civiles y militares. En ese mismo periodo también se ha apreciado un aumento de los ataques contra instalaciones sanitarias, tanto contra hospitales como contra puestos médicos.
El hospital de especialidades de Kafr Zita, ubicado en el norte de Hama (y conocido como el quinto hospital de campaña) es un claro ejemplo de los hospitales de campaña que son bombardeados por los aviones del régimen en la mayor parte de las ciudades sirias.
Las imágenes y los datos confirman que gran parte del hospital de Kafr Zita, que acogía a un gran número de heridos por su proximidad a varios frentes como el de Morek y Kafarnabuda, ha quedado destruida a raíz de los bombardeaos de aviones de guerra y helicópteros que lo atacan casi a diario. El régimen ha lanzado sobre el hospital más de 60 barriles explosivos, sin contar los misiles de los aviones militares y los proyectiles lanzados desde las barreras vecinas.
El dr. Hasán Al Aarach, director del hospital Hama Libre, nos informa de lo siguiente: «Los ataques contra el hospital se iniciaron después de la retirada del Ejército de la ciudad el 07/06/2012. Desde entonces el hospital ha sido atacado en varias ocasiones con proyectiles de artillería y lanzacohetes. Cuando los combates llegaron a las zonas cercanas a Kafr Zita como el frente de Kernaz y el frente de Morek, y se recrudecieron los combates en los campos de Hama y se produjo la batalla más importante de todas, la de «la incursión de Dios», el hospital jugó un papel importante como primera línea de evacuación al estar ubicado en la ciudad Kafr Zita que es la única carretera del Ejército Libre. El primer ataque directo contra el hospital tuvo lugar el 18/01/2014, cuando un helicóptero arrojó un barril explosivo al lado de las instalaciones hospitalarias que destruyó el mobiliario del centro además de sus habitaciones y el muro exterior. El hospital volvió a ser atacado el 16/06/2014 con misiles de un avión de guerra y al día siguiente, el 17/07/2014, se produjo el ataque que más dañó al centro: un helicóptero arrojó un contenedor explosivo frente al hospital a muy pocos metros y destruyó todos los generadores eléctricos causando graves daños en las salas de los pisos superiores».
El mismo día por la noche bombardearon con barriles explosivos la ciudad de Kafr Zita y diez minutos después del bombardeo comenzaron a llegar pacientes que presentaban síntomas de asfixia como consecuencia de la inhalación de gases tóxicos (casi 50 casos que en su mayor parte fueron controlados). Fueron ingresadas 35 personas en el hospital que se sumaron a 15 pacientes externos.
El 09/05/2014 antes del atardecer, el hospital fue atacado con un contenedor gigante arrojado por la criminal aviación de Al Asad que cayó frente a la entrada del hospital de la fachada norte provocando graves daños en la planta baja del hospital donde había un laboratorio, consultas, habitaciones de pacientes y las salas de la administración y la contabilidad. El edificio quedó parcialmente destruido y varios de sus muros se derrumbaron, a lo que hay que añadir la destrucción de todos los aparatos del laboratorio, excepto algunos dispositivos y materiales de las consultas. También quedó destruido completamente el generador principal del hospital y hubo que cerrar la planta baja y la primera planta, aunque se siguió trabajando en el sótano del edificio. Estos ataques repetidos, claramente intencionados, obligaron a la administración del hospital a establecer grandes barreras de tierra alrededor del hospital para que las habitaciones de los sótanos del hospital pudieran seguir operativas ya que los pisos superiores estaban fuera de servicio.
Sobre el hospital quirúrgico de Al Wisam, conocido como el sexto hospital de campaña, que también se encuentra en la ciudad de Kafr Zita en el campo norte de Hama, arrojaron más de 15 barriles explosivos, el último de ellos el 23/06/2014 y provocó la destrucción de gran parte del hospital y de la sala donde se encuentran los dos generadores eléctricos.
El hospital quirúrgico de Al Wisam fue uno de los primeros hospitales de campaña que recibió heridos de los bombardeos que ejecutó el régimen opresor contra civiles indefensos, sobre todo después de la retirada del Ejército de la ciudad el 07/06/2012. Desde entonces comenzaron los ataques contra el hospital con tanques, misiles o artillería a distancia. El último bombardeo fue hace casi un año y en él se emplearon barriles explosivos arrojados desde helicópteros y bombas termobáricas lanzadas por aviones militares. El ataque se produjo cerca del hospital en un radio de casi 500 metros y se registró la caída de más de 15 barriles y bombas termobáricas. Yaser al Qadur, director del hospital, informó al centro mediático del Centro Umayya del ataque: «El 23/06/2014 alrededor de las once de la noche, el hospital fue atacado con un enorme contenedor explosivo que cayó directamente en el interior del centro, concretamente en el ala este o posterior lo que causó una destrucción masiva de la estructura del lugar. En ese ala del hospital había habitaciones para enfermos y heridos, material médico y habitaciones del personal médico (…). Como consecuencia de este ataque murió Zahra Ibrahim al Hasán, una de las empleadas del hospital, y su hija Loyain de cuatro meses (…). El 50% del hospital quedó totalmente destruido y la otra mitad del hospital, es decir, el ala oeste, quedó parcialmente dañada».
La ciudad de Kafr Zita está siendo sometida a bombardeos con cloro altamente tóxico que afecta a las vías respiratorias cuyas membranas rompe y encharca los pulmones con una cantidad de líquidos que provocan la obstrucción de los canales respiratorios. La ciudad fue atacada por primera vez el 11/04/2014 con un contenedor de gas cloro. En aquella ocasión el hospital de Kafr Zita recibió más de 100 casos de asfixia y decenas de heridos por envenenamiento los días 12, 16 y 18 de abril respectivamente. El 05/22/2014 llegaron tres personas fallecidas por asfixia entre medio centenar de personas.
El último ataque contra el hospital central de Hama que se encuentra en el campo sur de Idlib fue el 09/12/2014 cuando un avión de guerra lanzó a las tres de la tarde una bomba termobárica que cayó en el ala este del hospital provocando graves daños materiales en las habitaciones del hospital en el segundo y primer piso.
Los aviones del régimen sirio atacan con frecuencia hospitales de campaña en diferentes zonas como Idlib y Alepo. El ataque más destacado fue el del hospital Dar Shifaa en Damasco.
Las heridas que sufren civiles o militares pueden hacerles más fuertes aún, lo que puede obligar al régimen sirio a intensificar sus ataques contra hospitales para destruirlos y deshacerse del mayor número posible de opositores.
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