Moataz Salama

Al Ahram Center for Political and Strategic Studies (Egipto), 22/10/2017

 

La estrategia de Trump hacia Irán adopta en general el punto de vista de los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), y en particular en el tema nuclear pues respondería a todas las demandas de esos Estados. No obstante, el CCG necesitaría ahora más que nunca adoptar una estrategia alternativa o una visión correctiva de la estrategia de Washington para desviarla o alejarla de la posibilidad de una guerra que podría provocar Trump o evitar posibles abusos que podría cometer la institución estadounidense como la invasión de Iraq de 2003, y que podrían arrastrar a la zona del Golfo a otra guerra regional cuyo fruto podrían ser décadas de petróleo. Sea cual sea la valoración del regreso a unas relaciones estratégicas entre EE.UU y el CCG, no podemos olvidar las novedades negativas existentes que consolidó la era Obama y cuyas raíces se remontan a los atentados del 11-S.

(…)

 

La estrategia alternativa destinada a que Irán retroceda, o lo que es lo mismo, una versión modificada por el CCG de la estrategia de Trump, permitiría llevar a Irán a una etapa de recesión lógica y progresiva por vías pacíficas que convencieran a canales internos de la imposibilidad de conseguir un “Irán natural” si se sigue con el régimen actual. Esa recesión de Irán permitiría llevar al potencial iraní a un punto intermedio de equilibrio y de autosuficiencia natural entre el Irán del Sha que expandió el nacionalismo persa, y el Irán de la revolución que expandió la ideología sectaria.

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