Arrastrados por sus propios prejuicios los comerciantes te dicen que si es cuestión de dinares seguro que los judíos están en el ajo. Como tampoco tienes otra pista, decides dirigirte a la judería cuyo centro es la plaza Sardoy. Y es que los estereotipos que cuando son negativos llevan a los prejuicios, que a su vez generan discriminación contra minorías, como le ha pasado a Dante por venir de otro lugar.

+info:

La buena convivencia entre comunidades en Al Ándalus no estuvo exenta de conflictos ni de sectores de la sociedad que querían imponer sus privilegios de poder. Como bien sabemos la persecución por motivos raciales o religiosos ha sido una constante en la Historia alimentada por estos prejuicios.

 

 

 

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